jueves, 3 de marzo de 2016

La Naturaleza, un entorno rebosante de conciencia mágica.

Cuando la belleza natural se extiende con vivificada intensidad, confeccionada hermosamente por los más colaborativos y esmerados Elementales, se genera un entorno con tanta energía que refleja sus esencias puras, los elementos se hacen claramente visible a todo su esplendor. Ese mismo lugar adquiere una abundante reunión de conocimientos, la magia misma se hace una realidad casi espontánea.
Al hacer contacto con alguno de estos entornos mágicos, nuestro ser se manifiesta expandiendo todos sus atributos, los niveles mas alto de conciencia humana son alcanzado. El aspecto material en nosotros se estabiliza en una relajación profunda tanto como ninguna otra, en lo emocional llega  a su éxtasis de la felicidad, lo astral se complace de estar presente agradeciendo a esa cálida Presencia Creadora, y en el estado mental se adquiere un dominio sobre las memorias y los pensares tan puros que casi son palpables. La facultad para ejercer magia está complementada, un recitar de palabras inspiradamente escogidas, un símbolo dibujado en el suelo, un pensamiento de deseo latente, es la llave final para lograr el anhelo.   

No hay comentarios:

Publicar un comentario